Campamento sobre la nieve en alta montaña para salir en busca de la perdiz nival: una aventura polar en el corazón de los Pirineos.

Son las siete de la mañana y el termómetro marca -20 grados. El campamento donde hemos dormido está helado. Cuesta ponerse las chirucas, pero más salir del saco. Suerte que Marc está preparando un café bien calentito. El perro está listo para guiarnos durante esta fría mañana de invierno. Apetece empezar a moverse para entrar en calor: el lagópodo alpino nos espera.

Podría ser un relato ocurrido en Escandinavia, pero no, es una aventura que te ofrecemos desde Pirenalia, única e irrepetible. Vive dos días en plena alta montaña, una experiencia tras la perdiz nival. En las condiciones más extremas es donde habita el lagópodo alpino; blanco en invierno, es el rey del mimetismo de la montaña. Dificilísimos de ver a simple vista, iremos tras él junto a un especializado perro de muestra, adiestrado para el seguimiento de aves de alta montaña. Un trekking con raquetas de unos setecientos metros de desnivel nos llevara a nuestro campamento situado a 2500m; a partir de este punto estaremos nosotros, la montaña y sus pequeños habitantes. Experiencia única en condiciones extremas tras un animal mítico.

Destino:	Pirineos andorranos (Andorra)
Fechas:	entre el 10 de enero y el 15 de abril
Plazas disponibles por grupo:	4 personas (minimum 2 personas)
Recogida:	Andorra
Durada:	un día y medio (una noche).
Precio:	400 € por persona

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Aunque ya de por si vivir la experiencia es algo mágico, en Pirenalia hacemos todo lo posible para que nuestros clientes realicen fotografías de una de las especies más emblemática de los Pirineos. No es nada fácil y la fotografía no está nunca asegurada, el terreno es dificultoso de andar, las condiciones son extremas y hay que ser muy rápido y tener todos los sentidos despiertos.

El equipo que nuestros guías recomiendan es un mono pié, imprescindible para apoyar el objetivo, cámaras preparadas para disparar en condiciones de poca luz, objetivos de larga distancia, batería de repuesto y tarjetas. Si se dispone de ella, una funda impermeable por si nieva. ¡Pensad que el equipo lo tenéis que subir en vuestra espalda! Sería interesante llevar todo el equipo en la misma mochila ya que se hace muy incómodo subir con dos mochilas.

Extremo

Polar Experiencia